30 años, 30 anécdotas, 30 regalos entre asociados llegados de toda España que disfrutaron de una tarde de compras previa.
Qué mejor momento y lugar para celebrar los 30
años de OPC Madrid que un 30 de junio, pistoletazo de salida de las vacaciones
de verano, en la terraza de Las RozasVillage, inmejorable anfitrión para una tarde llena de anécdotas y regalos.
Asociados de toda España acudieron a esta cita en
la que Matilde Almandoz, presidenta de OPC Madrid, hizo un recorrido por la
trayectoria de la asociación señalando que OPC
Madrid fue la primera -asociación de empresas de organización profesional
de congresos-, “la veterana, que sirvió
de germen para que después se crease la Federación”. Y celebró la presencia de Carlos de Sebastián, pionero del
sector, “uno de los fundadores de OPC Madrid, y que hoy, 30 años después, sigue
vinculado a la misma.”
De Sebastián a su vez agradeció el aplauso de
bienvenida bromeando con que al final de sus palabras le darían otro “porque al
fin y al cabo soy el único que ha seguido estando estos 30 años”.
Carlos de Sebastián se inició en la actividad de
la organización de eventos con Carolina García Sicilia que también acudió a Las
Rozas Village; juntos impulsaron Tilesa, empresa señera, hoy llamada Tilesa
Kenes.
Diana
Marín, de Las Rozas Villages, agradeció
la elección del espacio de compras de lujo madrileño para la celebración del 30
aniversario de OPC Madrid. De hecho, los asistentes que llegaron antes del
comienzo del evento disfrutaron de una tarde de compras con privilegios como un
personal shopper y descuentos
especiales.
Y tras los discursos, el grupo ‘Doctores de la
Impro’ relataron a su estilo particular las
anécdotas que los miembros de OPC Madrid habían vivido, y sufrido, a lo largo
de estos 30 años. Desde una asistente a un viaje que se empeñó en decir a
los pasajeros del vuelo en el que acababa de embarcar que iban a morir todos, y
que fue obligada, junto a la turoperadora a bajar del avión, a quien en la
presentación de un coche de lujo decidió que uno de los vehículos no estaba
bien situado, y sin tener carnet lo estrelló al ir a “moverlo un poquitín”,
pasando por otros momentos confusos en el sector de la traducción.
En la última parte de una tarde noche especial,
los ‘improvisadores’ condujeron el
sorteo de regalos: desde libros de cocina, a cenas en restaurantes de
hoteles; noches de hotel en Madrid, Granada, La Toja, en Girona, Elche, Oviedo,
Murcia, Cartagena...
Y una tarjeta regalo de 300 € para comprar en Las
Rozas Village.
No hubo para todos los asistentes, pero todos
brindaron por 30 años más de OPC Madrid.